El desmontaje como práctica articuladora de teoría/práctica 

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El verbo “desmontar” refiere a la acción de limpiar un terreno. Un desmontaje, por tanto, permite ver una mirada potencial o integral del crecimiento de una obra como un proceso vivo. 

Si bien el desmontaje remite al abordaje de los procesos artísticos, no siempre que se habla de desmontaje se hace referencia a la misma idea. 

Asimismo, se ha podido evidenciar que el desmontaje retoma modelos de análisis pretéritos, sin embargo, no se orientan de manera exclusiva al espectáculo, sino que la estrategia, precisamente, es el abordaje de los procesos creativos. Actualmente, se puede considerar que el desmontaje se ha instalado como una práctica eficaz para pensar los procesos creativos desde diversos aspectos. Dichos procesos se han convertido en el paradigma de los estudios teatrales contemporáneos, que pone en contacto la teoría y práctica disminuyendo la brecha entre ellos. 

El desmontaje puede entenderse así como una superación de esta brecha, si se concibe como una de estas prácticas emergentes que expandieron los límites de la teoría

No obstante, la noción de montaje no refiere únicamente a decisiones estéticas.